EL ARTE DE LA TRAGEDIA

 

MICRO RELATO BASADO EN LA INCREÍBLE HISTORIA ESCRITA POR JULIAN BARNES (Leicester 1946 Inglaterra) : NAUFRAGIO. 

Barnes: un grande entre los grandes de la literatura universal , vaya  por él,  con mi profunda admiración por su visión de la humanidad  expuesta en su libro UNA HISTORIA DEL MUNDO EN DIEZ CAPÍTULOS Y MEDIO (Anagrama 1989), quizás la más inteligentemente explicada. 

A mi maravillosa Orquídea, para que nunca te olvides de mí, tu amor verdadero, que debo permanecer mudo obligado por la sombra negra del materialismo más despreciable, rancio y obsoleto, que tanto daño a causado a los más débiles y  sensibles, a los más honestos consigo mismos . Albert Soms 15 de marzo 2021

"Es amor - dijo de repente - . No es más que eso." 

Cuando vuelva - espero vivir para ello  - a mi querida París, iré corriendo a la Rue de la Planche, como hizo el año 1855 el grandísimo pintor DELACROIX  (imprescindible visitar el Museo del mismo nombre, y aviso : cuesta encontrarlo)   tras ver el cuadro de la Balsa de la Medusa de Gérricault. Quedó tan impresionado... aterrado,  al convertirse en un sufridor como aquellos desgraciados  náufragos abandonados a su suerte en medio de un enfurecido   Atlántico subidos a una balsa  ( la que muestra el histórico cuadro ) . 

No hay respuesta a la mayoría de los sentimientos humanos, en especial : el Amor.  Que inútil era  con sus señales , aquel bohemio se sentía un cobarde en su estúpida lucha contra  la mediocridad  del poderoso materialismo que todo lo cubre, todo lo manipula,  para su gusto y provecho. Egoísmo superlativo supremo, que diría aquel tonto profesor de la Facultad de Derecho que siseaba en sus clases soporíferas de Derecho Fiscal. El Don yo , yo y nada más que yo . Aquel estúpido intercalaba frases de películas de machos ibéricos en sus lecciones  de economía. Diferencia entre la posesión y la propiedad. Pregunta de examen.  No hay espacio ni para ceder elegantemente ante la evidencia. No hay sitio para el perdón. La razón es mi razón y fuera de ella no hay nada, sólo los desgraciados, los perdedores y  los poetas bordes, como aquel escritor que creía que le iba a robar sus posesiones. ¡ Haz esto, haz lo otro. esto no se hace así, cuantas veces debo explicártelo ¡ , no soporto que me lleven la contraria. ¡Eres mía¡. No tienes derecho a ser dichosa¡. Moriré matando.  ¿Cómo se puede soportar lo insoportable?.  Aquel pobre iluso le daba  vueltas y más vueltas, pero , de momento no obtenía  una respuesta clara y segura. 

Ahora mismo, ya entrada la noche,  en la solitaria y desangelada estancia que habito , me veo , algo enfermo,  como impotente, bloqueado, sin ni tan siquiera poder desearle buenas noches y buena suerte a mi amada Orquídea.  Anclado entre la desesperación y la esperanza , como perdido en medio del mar.    Pero el efecto del cuadro sirve en parte para mitigar algo mi dolor.  Veo que el centro del óleo no es en realidad la balsa y sus moribundos. Alzo mis ojos llorosos y veo qué oscuro es el cielo; que enormes las olas. La catástrofe convertida en arte. Resulta dolorosamente liberador. ¿Será en Badalona?. 

               FIN DEL DRAMA